Cuando se trata de velar por el crecimiento de las plantas, existen numerosas creencias que pasan de generación en generación. Una de ellas, se relaciona a la tarea "obligatoria" de podar la mayoría de los brotes en agosto, pues muchos aseguran que es el último mes caluroso, y que por lo tanto, es la última oportunidad para incentivar el crecimiento de múltiples especies. Pero, ¿qué tan acertada es esta práctica? Te contamos a continuación:
¿Podar las plantas en agosto hace que crezcan mejor?
En el Hemisferio Norte, se dice que la temporada ideal para podar es de mayo a agosto, representando éste útlimo mes una especie de "impulso" para la mayoría de las plantas, según la creencia popular. Y es que a partir de septiembre, los aires de fríos de invierno comienzan a tener su presencia marcada, por lo que si se poda en ese lapso, se corre el riesgo de que los "arreglos" apresurados sequen la mejor parte de los brotes.
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Sin embargo, hay que aclarar que la creencia popular respecto al mes de agosto siendo "infalible," no tiene fundamento científico. En particular, la Botanical Society of America recuerda frecuentemente que no hay ni un sólo mes específico en el que sea obligatorio podar plantas. Más bien, dependiendo del fin de la poda y del estatus de la planta, se definen las temperaturas y las herramientas ideales para proporcionarle los arreglos necesarios.
Lo primero que hay que tener en claro, es que gracias al cambio climático actual, los meses no permanecen convencionalmente calurosos o fríos, especialmente en América Latina. Por lo tanto, sería mala idea podar en agosto si las temperaturas descienden dramáticamente. Además, hay que tener en cuenta situaciones urgentes que afectan el crecimiento de las plantas: si éstas están por marchitarse o están llenas de plaga, a veces no hay más remedio que podar para intentar salvarlas, independientemente del mes del año.
En general, los expertos recomiendan descartar agosto como un mes "todopoderoso," ya que es mucho más importante enfocarse en el tipo de poda que el crecimiento de las plantas requieran. Dependiendo de la temperatura y de la "anidación" de una planta, ésta debe podarse para limpieza o para florecimiento de los brotes. Además, el caso de los árboles es especial: podarlos en condiciones aleatorias puede ocasionar que se marchiten lentamente, así que lo mejor siempre es llamar a un experto. En conclusión: agosto puede ser, por lo general, una buena época para podar si las temperaturas permanecen templadas, pero eso no significa que septiembre esté prohibido para hacer arreglos o que sea "fatal" podar en enero.
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