El Príncipe Harry y Meghan Markle terminaron de romper la paciencia de la Reina Isabel II y es que decidió romper una de sus políticas más emblemáticas a lo largo de su reinado; todo por culpa de su nieto, te hablamos del “nunca te quejes, nunca expliques”.
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Su Majestad ordenó al personal del Palacio de Buckingham para que corrijan cualquier declaración que distorsione conversaciones privadas y las de otros miembros de la realeza. Esta medida dará una réplica directa a los rumores como una muestra de la exasperación que la Reina tiene por las declaraciones emitidas en varios medios de comunicación por personas del entorno de los duques de Sussex y su hija recién nacida.
De acuerdo con la BBC, Harry y Meghan Markle no consultaron a la monarca sobre el nombre de su hija, Lilibet; un apodo con el que la soberana es llamada desde pequeña.
Hay que recalcar que de forma inmediata un portavoz del duque de Sussex desmintió la información y aseguró que el nieto de Isabel II y la exactriz estadounidense contó con su aprobación y exigió una rectificación por parte del medio con la amenaza de iniciar acciones legales.
Kate Middleton quiere reconciliarse con Meghan y Harry
En tanto, Kate Middleton parece estar ansiosa por conocer al miembro más nuevo de la familia real, la sobrina Lilibet "Lili" Diana. Mientras visitaba una escuela primaria del Reino Unido el viernes con la primera dama de Estados Unidos, la Dra. Jill Biden, se le preguntó a la duquesa de Cambridge, de 39 años, sobre la niña del príncipe Harry y Meghan Markle, que nació el viernes pasado.
“Le deseo todo lo mejor. No puedo esperar para conocerla ”, respondió Middleton. "No la hemos conocido todavía, así que espero que sea pronto".
El domingo, Harry y Markle, que actualmente residen en una mansión en Montecito, California; anunciaron el nacimiento de su segundo hijo.
Baby Lili lleva el nombre de la abuela de Harry, la Reina Isabel II, cuyo apodo de infancia era "Lilibet". El segundo nombre de Lili, Diana, es un guiño a la difunta madre de Harry, la princesa Diana.
Middleton y su esposo, el príncipe William, estuvieron entre los primeros miembros de la familia real en felicitar al duque y la duquesa de Sussex por la incorporación más reciente a su familia.
La pequeña, que nació con un peso de 7 libras 7 11 onzas el pasado 4 de junio, hizo historia al convertirse en la primera hija de miembros principales de la familia real en nacer en Estados Unidos.
vbs