Poco se sabe de la vida de Kate Middleton desde que anunció que estaba enferma a finales del mes de marzo. Ante su ausencia, mucho se ha especulado cómo pasa sus días. Durante los meses subsecuentes se ha indagado sobre su paradero y la forma en que pasa sus días aislada en el palacio real, alejada de toda actividad pública que revele su verdadero estado físico y mental. En esta instancia, salió a la luz que la princesa no está bien y que cada día empeora su salud.
La familia real pidió a los seguidores de la realeza respetar el derecho de Kate a guardar en privado la información de su diagnóstico médico y los datos que consideren delicados. Además, anunciaron que la princesa estaría alejada de sus deberes reales el tiempo que los médicos consideren pertinente para su debida recuperación y hasta el momento así lo ha hecho, pues, no se le ha visto públicamente.
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Kate Middleton estaría llevando un tratamiento para eliminar las células cancerígenas que encontraron en su cuerpo, lo que la mantiene cansada y decaída, mientras al mismo tiempo disfruta de la convivencia intima con sus tres hijos: los príncipes George, Charlotte y Louis. En contraparte, el príncipe William ha estado cubriendo la agenda de eventos junto con el resto de los integrantes de la realeza, como la reina Camila, el rey y hasta a lado de su hijo mayor, quien será su heredero a la corona.
Aunado a ello, también se reveló que el príncipe también disfruta de su tiempo en eventos sociales y en salidas con amigos, mientras su esposa se queda esperando su regreso sola, pues, se asegura que no permiten que la visiten sus amigos ni personas cercanas para evitar que se filtre información. Además, la princesa de Gales estaría enfrentándose una vez más a fuertes rumores de una infidelidad, lo que ha incrementado sus problemas matrimoniales.
En cima de los síntomas de la enfermedad y los efectos secundarios de las quimioterapias, estaría enfrentándose a problemas familiares, estrés y a ansiedad al estar sola sin posibilidad de salir fuera de las cuatro paredes del palacio. Algo que también le causa preocupación es la presión que siente por la posibilidad de la muerte del rey Carlos, quien también fue diagnosticado con cáncer a principios de este año, ya que, esto implicaría que su esposo ascienda al trono y asuma el cargo de rey de Reino Unidos de forma anticipada.