Si tu cumpleaños se celebra en el mes de septiembre, este artículo te interesará mucho. ¿Sabías que el mes en que naciste puede tener una influencia en el karma que debes sanar en esta vida? Aunque no será nada fácil hay una manera de sanarlo y aquí, te mostraremos a detalle una guía para que puedas hacerlo.
Según la numerología, si naciste en septiembre, tu karma se asocia con el número 9. Pero, ¿esto qué significa? En términos simples, tu misión kármica en esta vida es sanar el apego y mejorar la autovaloración. En otras palabras, debes trabajar en tu amor propio y tu independencia emocional. ¡Por mucho que te cueste!
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Es posible que desde una edad temprana hayas sentido que la gente no te comprende completamente o, lo que es peor, te hayas sentido rechazado o menospreciado. No es coincidencia que te preocupe tanto lo que otros piensan de ti. Aquí es donde entra en juego el karma que debes sanar: la autovaloración y el apego.
¿Cómo sanar mi karma por haber nacido en el mes de septiembre?
Primero medita profundamente, después de todo, si no te valoras a ti mismo: ¿cómo puedes esperar que otros lo hagan? Y no estamos hablando de egoísmo, sino de amor propio. La buena noticia es que eres muy sensible y tienes una inclinación natural para ayudar a los demás, lo que te convierte en una persona noble.
Sin embargo, este karma también puede llevarte a asumir el papel del salvador o la salvadora; tiendes a ser excesivamente protectora con los demás. Aquí, el equilibrio es fundamental, recuerda que ayudar está bien, pero no a expensas de tu propio bienestar. Entonces, si deseas sanar este karma de una vez por todas, debes comprometerte contigo misma(o).
¡El compromiso personal es la clave! Es hora de invertir en tu crecimiento personal, de sanar las heridas del pasado que te han llevado a buscar validación en los demás. Y no estamos hablando solo de terapia, sino de acompañarla con cualquier actividad que te ayude a reconocer tu propio valor. Puede ser meditación, ejercicio, arte, o cualquier cosa que te haga sentir completa(o) y valiosa(o).
Nacer en septiembre te confiere una energía especial, pero también te asigna una tarea kármica clara: sanar el apego y cultivar la autovaloración. Así que, ¡ahora sabes por dónde empezar tu viaje de autodescubrimiento y crecimiento! Tienes en tus manos las llaves del amor propio, ¡sigue ese camino hasta llegar a la meta!