El narcotraficante colombiano Gilberto Rodríguez Orejuela, quien fuera líder del poderoso Cártel de Cali, falleció la noche del 31 de mayo a los 83 años en una cárcel de Estados Unidos, así lo confirmó este miércoles su abogado defensor.
El capo fue interpretado por el actor mexicano Damián Alcázar en la exitosa serie de Netflix, 'Narcos', que en su tercera temporada se enfocó en la organización criminal liderada por los hermanos Rodríguez Orejuela tras la muerte de Pablo Escobar y la caída del Cartel del Medellín.
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De acuerdo con su defensor público, David Markus, el exjefe del narcotráfico había sobrevivido a un cáncer de próstata y colon, sin embargo, durante la pandemia su estado de salud empezó a deteriorarse hasta volverse cada vez más frágil.
Orejuela había solicitado una excarcelación anticipada por razones humanitarias, la cual le fue negada en 2020 por un juez federal.
“El Ajedrecista”, como era conocido, por su inteligencia y ingenio para las estrategias que utilizaba en sus negocios, fue capturado en Colombia en 1995 y extraditado a Estados Unidos en 2004. Desde entonces cumplía una sentencia de 30 años en la prisión de Butnert, en Carolina del Norte.
De mensajero a rey de la droga
Rodríguez Orejuela nació en el pueblo de Mariquita, a 105 kilómetros al noroeste de Bogotá. Fue el segundo de ocho hermanos.
Cuando era niño sus padres trasladaron a toda la familia hasta Cali, donde Orejuela comenzó como mensajero en una farmacia, pero pronto pasó a ser uno de los principales barones de la droga en Colombia.
En 1970 montó su primera botica, de la que años después se formaría una amplia cadena de farmacias conocida como Drogas La Rebaja. También fue dueño de Laboratorios Kressford e integrante de juntas directivas de otras corporaciones y hasta del equipo de fútbol América de Cali.
Ese poder económico pronto le abrió las puertas a las altas esferas de la vida política y social de la ciudad y junto con su hermano, Miguel Rodríguez Orejuela, lideraron el poderoso Cartel de Cali en la décadas de los '80 y '90, llegando a controlar el 80 por ciento de los narcóticos que se exportaban a los Estados Unidos y Europa.
Esta organización criminal dominó todo el mercado de la cocaína que se transportaba a Nueva York y otras ciudades europeas, esto sucedería mientras mantenía una brutal guerra contra su mayor rival y jefe del Cártel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria, abatido por la policía en diciembre de 1993 con la colaboración del Cartel de Cali y de grupos paramilitares, según precisó el escritor Fernando Rodríguez Mondragón en su libro 'El hijo del ajedrecista'.
No obstante, luego se supo que Rodríguez Orejuela cuidó de la viuda de Escobar durante un tiempo, pues estaba amenazada de muerte por paramilitares y testaferros de su exesposo.
bnaj