La saliente canciller alemana, Angela Merkel, aportó un singular toque de color en medio de la sobria campaña hacia las elecciones del domingo, al visitar un parque de aves en el que posó con una media decena de loros.
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Los pájaros revoloteaban alrededor del líder alemán y comían de un pequeño vaso de papel lleno de "néctar de loro", elaborado con polen de flores secas, azúcar de frutas, cereales y agua.
No contento con la comida que le ofrecían, uno de los loros arcoíris dio un pequeño picotazo en la mano de la gobernante alemana, lo que provocó un grito teatral de Merkel.
Debido a un desafortunado altercado entre la mano de Merkel y el pico de un pájaro, la canciller sufrió una pequeña lesión. Afortunadamente, perseveró y, con suerte, con un trauma emocional mínimo.
Merkel, que no se postuló para buscar un quinto mandato, visitó el jueves el estado nororiental de Mecklemburgo-Pomerania Occidental para promover al candidato del bloque Unión de centroderecha en el distrito electoral que ocupa desde 1990.
Alemania celebra el domingo unas elecciones nacionales que determinarán la composición del Parlamento. El partido más fuerte generalmente termina liderando el nuevo gobierno y nombra un nuevo canciller, que debe ser confirmado por la mayoría de los legisladores.
Entre los que compiten por tomar el poder se encuentran Olaf Scholz de los socialdemócratas, Annalena Baerbock de los Verdes y Armin Laschet de los demócratas cristianos .
Angela Merkel, que ha sido canciller durante casi 16 años, estaba en una gira de despedida por su circunscripción local en el estado norteño de Mecklemburgo-Pomerania Occidental.
Con más de 30 años de carrera política, Angela Merkel, de 67 años, se retirará como dirigente, con la popularidad todavía en el cenit, pese a un balance poco reluciente.
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Con información de agencias.
JOS