Tras meses de incertidumbre sobre el estado de salud de Kate Middelton y contadas apariciones publicas como el Tropping the Colour, en donde asistió junto al príncipe William y sus tres hijos, así como su asistencia a la final de Wimbledon en donde acudió junto a la princesa Charlotte y su hermana Pipa, Kate Middelton regresa a las cámaras con una nueva aparición pública en la finca de Balmoral.
El regreso de Kate Middelton a la vida publica es uno de los temas más sonados actualmente, pues su larga ausencia de la familia real, debido a su diagnóstico de cáncer, ha dejado gran preocupación en sus seguidores y en la realeza británica.
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Al ser uno de los miembros más queridos de los Windsor, la ausencia de Kate ha impactado significativamente a la percepción de la corona británica, por lo que sus apariciones han llenado de esperanza y calmado las preocupaciones sobre el futuro de la princesa de Gales.
A pesar de los rumores de que la princesa de Gales asistiría a los Juegos Olímpicos de Paris 2024, su participación se limitó a un video para sus redes sociales, en donde agradecía y felicitaba a los atletas británicos por su gran desempeño.
Kate Middleton regresa al ojo público acompañada por el príncipe William en Balmoral
Recientemente, Kate ha hecho una esperada reaparición en público acompañada por su esposo, el príncipe William en un solemne servicio religioso celebrado en Balmoral. Esta aparición marca su retorno a los eventos oficiales, tras un largo período de discreción en su vida pública.
Kate y William asistieron a la misa dominical en la pequeña la Iglesia de Crathie Kirk, ubicada en un pueblo escocés de Crathie, junto a Balmoral, en donde junto a su hijo, acompañaron al rey Carlos III y a la reina consorte Camilla en el servicio religioso.
La princesa de 42 años, fue fotografiada en junto al príncipe William en su Range Rover, luciendo muy radiante en un atuendo marrón claro con un sombrero de plumas de faisán, mientras que el hijo mayor del rey Carlos, eligió un traje azul marino. Por su parte, el rey de Inglaterra optó por un tradicional kilt escocés y su esposa Camilla por un conjunto de tartán rojo y verde.
La reaparición de la princesa de Gales en la iglesia Crathie Kirk ha tenido un gran significado, pues durante muchos años, ha sido el lugar de culto favorito para la familia real durante sus estancias en Balmoral. Incluso fue sede de un servicio privado para los Windsor tras la muerte de la reina Isabel II y el fallecimiento de la princesa Diana en su momento.
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