El hombre más rico del mundo, Elon Musk, dijo a los posibles inversores en su acuerdo para comprar Twitter que planeaba deshacerse de casi el 75% de los 7 mil 500 trabajadores de la empresa, informó el Washington Post este jueves, citando entrevistas y documentos.
Se espera que los recortes de empleos ocurran en los próximos meses, sin importar quién sea el propietario de la empresa, según el informe.
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La gerencia actual de Twitter planeó reducir la nómina de la compañía en alrededor de 800 millones de dólares para fines del próximo año, una cifra que significaría la partida de casi una cuarta parte de la fuerza laboral, según el informe.
El personal de recursos humanos de la compañía les ha dicho a los empleados que no estaban planeando despidos masivos, pero los documentos muestran que ya existían amplios planes para expulsar al personal y reducir los costos de infraestructura antes de que Musk ofreciera comprar la empresa, según el Washington Post.
Musk había tratado de alejarse del trato para comprar Twitter en julio alegando que la compañía subestimó la cantidad de cuentas de bot y spam en la plataforma, lo que inició una serie de demandas entre las dos partes.
Cambio de opinión
A principios de este mes, Musk cambió de opinión y dijo que procederá con el trato en los términos originales. Sin embargo, Twitter solicitó a la corte que proceda con el juicio programado para el próximo 17 de octubre, alegando que el multimillonario se rehúsa a aceptar las "obligaciones contractuales" de su acuerdo.
La jueza encargada del caso, Kathaleen McCormick, confirmó que por el momento los preparativos del juicio siguen adelante.
"Twitter no acepta un sí por respuesta. Sorprendentemente, han insistido en continuar con este litigio, poniendo imprudentemente en peligro el acuerdo y jugando con los intereses de sus accionistas", señalaron los abogados del dueño de Space X.
La defensa de Musk insistió en que no hay motivos para pensar que su cliente no va a obtener de los bancos los fondos que necesita para completar la operación.
Los abogados aseguraron que seguir adelante con el juicio sería un "enorme desperdicio de recursos" y lamentaron que con su decisión, Twitter "ponga en peligro la transacción jugando con los intereses de los accionistas".
abc