Donald Trump sobrevivió a un intento de asesinato a manos de Thomas Matthew Crooks hace algunos días mientras se encontraba en un mitin en Butler, Pensilvania, donde una de las balas rozó su oreja sin pasar a mayores, pero mientras las investigaciones continúan, ahora se han encontrado cosas más inquietantes sobre el tirador y es que se cree que uno de sus objetivos era Kate Middleton.
Se descubrió que el joven de 20 años estaba investigando a la princesa de Gales a través de internet, donde también había descargado imágenes de ella, de acuerdo al análisis del FBI que realizó en sus dispositivos, dos teléfonos celulares, así como en su computadora.
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Aparentemente, el hombre tendría una fijación con la futura reina de Inglaterra, según la policía de Estados Unidos, y no solo con ella, sino con la familia real británica, esto después de haber registrado la casa de Matthew y confiscar sus dispositivos tras el ataque que realizó.
Esto es lo que encontraron en los dispositivos de Matthew Crooks sobre la familia real británica
De acuerdo a la Radio Pública Nacional, el tirador tenía imágenes de la princesa en su teléfono y había buscado información sobre ella, así como de Donald Trump y del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hasta del director de FBI, Christopher Wray y el fiscal general, Merrick Garland.
Hasta el momento, se desconoce cuál es la razón por la que Crooks buscaba información de la esposa del príncipe William, pues era la única persona no estadounidense que se encontraba en su historial de búsqueda en internet, mientras que todos los demás eran figuras públicas o políticas norteamericanas.
Esta información habría sido confirmada al Daily Mail, aunque el FBI se negó a hacer comentarios, además de que el Palacio de Kensington tampoco quiso hablar sobre este tema que envuelve a la princesa, aunque por protocolo, la realeza nunca habla de temas de seguridad.
Recordemos que durante este año, la princesa de Gales ha tenido muy pocas apariciones después de haber sido diagnosticada con cáncer, por lo que es su último evento público fue el pasado 14 de julio en el torneo de tenis de Wimbledon, un día después del atentado contra Trump.