El día de ayer, sábado 13 de julio, Donald Trump sufrió un intento de asesinato, el cual sigue estando en investigación por las autoridades. Afortunadamente, el expresidente resultó ileso; sin embargo, las balas llegaron a herir a un asistente del mitin en el que se encontraba dando un discurso. El hombre falleció al momento y ya fue identificado como Corey Comperatore, quien era un exbombero.
Tras el tiroteo, el candidato republicando reportó desde sus redes sociales que se encontraba en buen estado y que solo había sido herido en la parte superior de la oreja derecha, motivo por el que en el acto se le vio sangrando. En el mismo comunicado también aprovechó para enviar sus condolencias a las familias de las dos víctimas que resultaron heridas y también al hombre que fue reportado muerto.
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“Lo más importante es que quiero dar el pésame a la familia de la persona que murió en el acto y también a las familias de las otras personas que resultaron gravemente heridas. Es increíble que un acto así pueda tener lugar en nuestro país”, escribió Trump.
El mitin se llevó a cabo en Butler, Pensilvania, donde se reunieron cientos de simpatizantes republicanos, quienes esperaban poder disfrutar de la presencia de Donald Trump y escuchar sus palabras. No obstante, todo resultaría un desastre al escucharse los balazos y ver al candidato ensangrentado, por lo que la multitud se dispersó y trató de protegerse tirándose al suelo. Entre tantos se encontraba Corey Comperatore con su esposa, quien esta mañana habló con el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro.
“Corey era un ávido partidario del expresidente y estaba muy emocionado de estar allí anoche con él en la comunidad”, dijo Shapiro.
De acuerdo con las palabras que la mujer dirigió al gobernador, su esposo era un bombero local que siempre arriesgó su vida para prevalecer la de los demás, lo cual siguió haciendo hasta el día de su muerte. “Corey se lanzó sobre su familia para protegerlos anoche en esta manifestación”, expresó Shapiro añadiendo que el Comperatore será recordado como un héroe.
“Corey era padre de niñas. Era bombero. Iba a la iglesia todos los domingos. Corey amaba a su comunidad. Y, sobre todo, amaba a su familia”, finalizó.