Una insólita y curiosa historia se ha vuelto viral en las redes luego de que ciudad británica de Manchester diera a conocer el caso de Joshua Dodson, un joven acusado de robar un auto que intentó escapar de la policía de la forma más inesperada y digna de cualquier caricatura: escondiéndose dentro de un oso de peluche.
De acuerdo con la BBC, todo empezó cuando la policía atendió el llamado de emergencia por el hurto de una camioneta Mitsubishi valuada en más de 350 millones de pesos en el barrio de Rochdale. El ladrón había escapado con el carro, así que se desplegó una búsqueda para localizarlo.
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Dodson, de 18 años, ya estaba en la mira de los oficiales después de que se dio a la fuga con el auto robado tras cargar gasolina de una estación de servicio e irse sin pagar. Desde mayo, las autoridades le seguían el rastro al joven, quien luego de las investigaciones, finalmente pudo ser capturado hace unos días, pero vaya sorpresa que se llevaron los agentes cuando llegaron al lugar donde se ocultaba.
Fue en julio que las autoridades realizaron un allanamiento en la casa de la novia del acusado y allí advirtieron un curioso detalle, de acuerdo con información del diario The Sun. Al principio los uniformados recorrieron cada rincón sin encontrar rastros del joven, hasta que de pronto un peluche gigante les llamó la atención.
“Cuando vimos a este gran oso respirando durante la cacería de un ladrón, pensamos que algo no estaba bien”, expresó la policía de Manchester en su cuenta de Twitter.
Y es que, en efecto, el muñeco de casi dos metros y con un agujero gigante en la parte de abajo, tenía adentro al hombre que estaban buscando y que intentaba pasar desapercibido para los policías que revisaban minuciosamente el lugar.
“Nuestro grupo de trabajo y el equipo de tareas de la división en Rochdale apenas podían creer lo que encontraron en busca del hombre prófugo. (…) Ciertamente pasamos un tiempo tolerable llevando ante la justicia al ladrón”, agregó la Policía.
Finalmente un tribunal de Manchester sentenció al joven, quien aceptó todos los cargos en su contra. Además, a su caso se tuvieron que añadir otros agravantes, como el robo de una camioneta de la marca Vauxhall Astra y su caja de herramientas en meses pasados, así como manejar sin tener los documentos del seguro vigentes.
En consecuencia, el joven fue condenado a nueve meses en prisión y como sanción adicional, su licencia de conducción fue suspendida, por lo que no podrá manejar ningún carro durante 27 meses. Una idea que parecía ingeniosa al principio, pero claramente no funcionó.
bnaj