Si eres fanático o en alguna ocasión has visto el clásico filme Mi Pobre Angelito te habrás preguntado ¿a qué se dedicaban los padres de la familia McCallister para poder permitirse tener una casa tan impresionante? Hoy te compartiremos la respuesta a esta incógnita que ha despertado la curiosidad entre el público durante años.
Incluso en la actualidad después de décadas del estreno del filme la casa McCallister ubicada a las afueras de Illinois en la Villa Winnetka continúa siendo un sitio turístico visitado por miles de personas que quedaron facinados con la casa en la que el pequeño Kevin protagonizó una serie de enredos y aventuras. Desde el planteamiento de la trama de Mi Pobre Angelito podíamos darnos una idea del poder adquisitivo de la familia McCallister gracias a su casa.
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Debido al interés del público en conocer más detalles acerca de una de las historias predilectas de Navidad algunos economistas que durante la década de los 90, cuando fue producida la cinta trabajaban para el Banco de la Reserva Federal de Chicago declararon que una vivienda como la de la familia McCallister solo se la podía permitir el 1% de la población de Chicago que pertenecía a clases adineradas y que el inmueble solo lo habría podido adquirir una persona con un ingreso de alrededor de 305 mil dólares.
Expertos se han dado a la tarea de investigar en la vida secreta de los McCallister
De acuerdo con una valoración actual del inmueble que formó parte esencial de la película Mi Pobre Angelito, el precio de la vivienda rondaría por encima de los 2 millones de dólares, solo las familias con un ingreso de alrededor de 730 mil dólares podrían aspirar a permitirse comprar una casa de esas características. La cinta no profundiza en las actividades profesionales ni da detalles acerca de la vida laboral de los padres McCallister.
De acuerdo a la información que se presenta de manera breve en la cinta el padre de Kevin se dedicaría a los negocios, mientras que su madre trabajaría como diseñadora de moda, aunque a ciencia cierta en la cinta esto se mantiene como un misterio que tampoco se devela en la secuela de la cinta Mi Pobre Angelito 2: perdido en Nueva York. Si eres fan de la cinta seguro te habías hecho estas preguntas anteriormente.
Hoy en día la casa de los McCallister se alquila al público como Airbnb tras haber sido vendida en 2011 por 1.59 millones de dólares. Si eres fanático de esta entrañable historia de navidad y te gustaría conocer la casa de los McCallister e incluso alojarte algunos días en ella esta es tu gran oportunidad de revivir y recordar los momentos más icónicos de la cinta que es sin duda un clásico de las épocas decembrinas.