Últimamente, se han puesto de moda decorar la casa con plantas como las suculentas, ya que, los expertos aseguran que son plantas muy nobles que requieren de pocos cuidados. Según el Feng Shui son plantas atraen la abundancia.
No regar en exceso
Las suculentas son un tipo de cactus que almacena mucha agua en sus hojas, por lo que, no necesita riegos constantes. Las suculentas y cactus, en general, se pueden regar de 8 a 10 días y revisar que la tierra esté bien seca, porque si no, las raíces se pudrirán.
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El agua de lluvia es ideal para regar estas plantas y se debe de evitar el agua que haya pasado por algún tipo de filtración.
Investigar el tipo de planta y sus cuidados específicos
Lo principal para poder mantener viva y sana una suculenta es investigar qué tipo de suculenta o cactus es. Se recomienda preguntar al vendedor dónde se adquirió el tipo y sus cuidados específicos, así podrás asegurar que no la estás regando de más o de menos y el tipo de tierra que necesita.
Trasplantar en tierra con nutrientes
Para que las suculentas o cactus sigan creciendo, es necesario cambiarlas de maceta cada tres a cuatro años, o cuando las raíces sean visibles y salgan por debajo de la maceta. Se recomienda trasplantar en tierra con nutrientes y separar las raíces, teniendo cuidado de no romperlas.
La mejor temporada para hacer el proceso de trasplantar una suculenta o cactus es en primavera.
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Escoger una maceta adecuada
Se recomienda plantar las suculentas en una maceta de mayor diámetro a la planta y que sea de cerámica o arcilla y esté esmaltada por dentro, ya que este material es más va a mantener frescas las raíces en comparación de las de plástico.
Cuida su temperatura
Son amantes de las temperaturas bajas, pero no menores a 8 grados; la temperatura ideal sería entre 8°C por las noches y 20°C durante el día. Se recomienda ponerla en un lugar donde le de poca luz y tenga ventilación como a lado de una ventana.
Los tipos de suculentas y cactus con pocas o nulas espinas necesitan poca cantidad de sombra y sol no directo. Por otro lado, los cactus más peludos y con muchas espinas es mejor que plantarlas en el jardín y reciban el solo directo.