El caso de Madeleine McCann ha sido reabierto después de que la joven Julia Wandelt asegurara creer que ella era la pequeña desaparecida, además de tener pruebas.
Recordemos que la niña desapareció en Praia da Luz, Portugal, en 2007 cuando se encontraba de vacaciones con su familia en dicho país.
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La polaca asegura que ella podría en realidad ser Madeleine, pues tendría algunos aspectos físicos similares a los de la desaparecida tales como la mancha en el ojo y lunares.
Wandelt pidió a los padres de la entonces pequeña realizarse una prueba de ADN, al igual que sus padres, quienes se han negado a hacérsela.
Además de que sus propios padres le han dado la espalda y aseguran que solo quiere fama y que tiene problemas mentales, ahora la policía también lo ha hecho.
"Siempre hemos intentado entender las cosas que le estaban pasando a Julia. Terapias, medicación, psicólogos y psiquiatras. Sus amenazas, sus mentiras y manipulaciones hacia nosotros, sus acciones en internet... Hemos tratado de prevenirlo (...) Se mudó, no quiere tomar su medicación. Se negó a que le trataran en uno de los mejores hospitales psiquiátricos de Polonia", indicaron sus padres.
¿Por qué la policía cerró el caso de Madeleine McCann?
La Policía Polaca ha invalidado las evidencias que se tenían del caso: "Queda descartada la versión de los hechos".
De acuerdo con el medio polaco Gazeta, el portavoz de la Policía Provincial en Wroclaw, donde vive Julia, asegura que hay contradicciones.
"La actuación de los agentes de la Jefatura Provincial de Policía en esta fase contradice la versión presentada por esta mujer", indican.
Algunas de estas pruebas eran las fotografías donde Julia buscaba comprobar su parecido físico, además de que no tiene recuerdos sobre su infancia. solo de unas "vacaciones en un lugar cálido donde había playa y edificios blancos o de colores muy claros con apartamentos".
Tras darse a conocer la postura de la policía, la joven aseguró que tanto ellos como los medios locales están mintiendo.
Asimismo, la policía habría descartado que se tratara de Madeleine, pues sus padres habrían presentado la documentación oficial como prueba, tales como acta de nacimiento.
También destacan que existe una diferencia entre las edades de ambas, pues McCann tendría ahora 19 años, mientras que Julia tiene 21 años de edad.
Además, el detective privado Francisco Marco, líder en la búsqueda de la niña realizó un análisis biométrico a Julia y con ello decartó que se tratara de ella.
“He hecho una búsqueda biométrica y no hay parecido con las características de Madeleine”, dijo a la cadena española RAC1.
Después de 15 años de la desaparición de la pequeña, no existen culpables a pesar de que hubo detenidos e incluso se les señaló a sus padres, después de que unos perros rastrearon sangre dentro de su automóvil.
amv