La flor de Cempasúchil es una de las más icónicas de la época del Día de Muertos; una de las fechas más honradas y conmemoradas en México el 1 y 2 de noviembre. Su nombre proviene del náhuatl Cempohualxochitl que significa 20 flores o varias flores. ¿Sabías que no sólo se usa para adornar los altares en estos días? ¡También puedes comerla! Aquí te detallamos cómo preparar un atole otoñal de Cempasúchil que puedes hacer en menos de 20 minutos.
Los antepasados mexicanos solían usar la flor de Cempasúchil en las ofrendas de muertos por su color amarillo, y se creía que era la flor que marcaba el camino a los difuntos que cada año nos vienen a visitar; también es considerada un símbolo de vida y muerte y los estados de México en donde más se produce gracias al clima es en Hidalgo, Guanajuato, Estado de México y Michoacán. Se da sólo después de la época de lluvias.
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La flor de Cempasúchil no sólo se utiliza para las ofrendas del Día de Muertos a manera de adorno en las ofrendas, sino también en la gastronomía, en la preparación de diversos alimentos y bebidas. A continuación, te enseñamos a preparar un atole otoñal que puedes hacer en menos de 20 minutos con ingredientes que fácilmente sueles tener en tu cocina. Aquí te detallamos la manera de hacerlo.
Ingredientes:
- 6 flores de Cempasúchil
- 250 gramos de piloncillo
- 1 ramita / varita de canela
- 300 gramos de masa de maíz nixtamalizado (3/4 de taza)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1 litro de leche
- 1 litro de agua
Preparación
Primero se debe deshojar la flor de Cempasúchil para reservarlos en un recipiente. El tallo no se usará para el atole otoñal. Se deben lavar y luego, desinfectar con microbicida.
Por otro lado, debes de poner a calentar en un recipiente, olla o cazuela el litro de agua, con el piloncillo y el trozo de canela a fuego alto. Deberás esperar a que el piloncillo se disuelva.
Luego de que hayas desinfectado la flor de Cempasúchil, procede a licuarla con la leche. Se debe licuar muy bien la mezcla durante 2 minutos hasta que se forme una consistencia líquida de color naranja. Resérvala.
Ya que el piloncillo se disolvió por completo, tendrás que vaciar la mezcla de la leche con las flores de Cempasúchil. Asegúrate de mezclar bien. Baja el fuego, para que esté a nivel medio.
Con el resto de la leche que no usaste, licúala con la masa de maíz nixtamalizado. Licúa por 2 minutos y una vez que esté lista vacíala en la mezcla del Cempasúchil con el piloncillo que tienes en la estufa a fuego medio. Agrega también la esencia de vainilla.
Mueve la mezcla hasta que espese. Pasados los 15 minutos retira del fuego ¡y listo!