Una pareja estadounidense se convirtió en la primera en completar la renovación de una casa abandonada en la ciudad siciliana de Sambuca, Italia, la cual compraron por un precio muy bajo y que convirtieron en una mansión.
Shelley Spencer y Massoud Ahmadi, procedentes del condado de Montgomery, Maryland, fueron una de las miles de personas a nivel mundial que aprovecharon los valores insólitos para comprar una vivienda histórica y reconstruirla.
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Lograron acceder a esta oportunidad luego de que las autoridades locales subastaran 16 casas abandonadas con precios a partir de un simbólico euro, poco más de un dólar.
Amor a primera vista
La pareja anhelaba alejarse de las largas autopistas y el cemento, desde 2019 comenzaron a considerar un cambio radical de sus vidas: "Fue amor a primera vista", relató Spencer a CNN.
"Sambuca es muy limpio, con bonitos pavimentos de piedra antigua que recuerdan a los de (el barrio de Washington D.C.) Georgetown y las luces de la calle por la noche son muy románticas".
Spencer y Ahmadi se alegraron cuando se enteraron que su oferta de 10.150 euros (unos 10.372 dólares al hacer la compra) por un palacio de 100 metros cuadrados había sido aceptada. Rápidamente se pusieron a trabajar para darle un espectacular cambio a la propiedad.
Dos años después, y mucho antes del plazo de tres años establecido por las autoridades locales, su refugio italiano está terminado y transformado en el hogar de sus sueños.
¿Cómo es la vivienda?
Ahmadi y Spencer, que trabajan en proyectos de desarrollo global, invirtieron unos 250 mil dólares para transformar la propiedad en ruinas en una lujosa casa, que, según dicen, ahora luce como "una casa renacentista".
La residencia renovada cuenta con cuatro baños de mármol, pero su característica más destacada es un elevador interior que la pareja instaló para subir y bajar sus tres niveles.
Además del elevador, la casa cuenta con una zona de relajación, una suite para invitados, un dormitorio principal y una zona de estar con una moderna cocina abierta, además de varios balcones.
"Queremos envejecer aquí, hacer yoga cada día y tomar café en la terraza con vistas al lago neblinoso”, dijo Spencer. ”Así que pensamos que sería estupendo sentirnos lo más cómodos posible obviando todos esos estrechos escalones, y no tener que subirlos y bajarlos varias veces al día", explicó.
Ahora la pareja manifestó que planea dividir su tiempo, al menos por el momento, entre su hogar en Estados Unidos e Italia, pasando alrededor de la mitad del año en su casa de dos habitaciones, junto con su hija y sus nietos.
Con información de agencia ANSA.