La Corte Suprema de Estados Unidos volvió a imponer este viernes la pena de muerte contra Dzhokhar Tsarnaev, de 28 años, uno de los responsables del atentado terrorista que mató a tres personas y dejó heridas a 264 en la línea de meta de la maratón de Boston el 15 de abril de 2013.
Con seis votos a favor y tres en contra, la Corte revirtió la decisión que un tribunal de apelaciones tomó en agosto de 2020, cuando revocó la pena impuesta en contra de Tsarnaev y anuló tres de las treintas condenas que pesan sobre el llamado "terrorista de Boston".
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En aquel momento, el tribunal consideró que el juez del juicio contra Tsarnaev, celebrado en 2015, excluyó pruebas que podrían haber demostrado que el entonces acusado había sido radicalizado y adoctrinado por su hermano mayor, Tamerlan, quien murió durante la huida en un tiroteo con la policía. Un argumento que podría haberle restado algún grado de responsabilidad en el atentado.
Sin embargo, el magistrado Clarence Thomas, en representación de la mayoría del Supremo, señaló que “Dzhokhar Tsarnaev cometió crímenes atroces" y enfatizó que durante su proceso se le garantizó el derecho a la Sexta Enmienda: "un juicio justo ante un jurado imparcial”.
A pesar de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho que se opone a la pena máxima, su administración defendió la sentencia emitida. Y es que cabe recordar que el Departamento de Justicia de Biden paralizó las penas de muerte federales el verano pasado después de que la Administración de Donald Trump realizara 13 ejecuciones en los últimos seis meses de su mandato.
Adrianne Haslet, una bailarina profesional que perdió una pierna en los ataques, publicó en su cuenta de Twitter: "Felicidades a todos los que trabajaron incansablemente por la justicia", mientras que Dic Donohue, un policía de tránsito que resultó gravemente herido en un tiroteo con los dos atacantes, tuiteó: “En resumen: no puede matar a nadie más”.
Esta decisión del panel de jueces confirmó la condena de Tsarnaev por 27 cargos, ya que su culpabilidad nunca fue cuestionada. El asunto en cuestión era si debía enfrentar la pena de muerte o cadena perpetua.
Las tres víctimas que murieron en el bombardeo fueron la estudiante graduada china Lingzi Lu, la gerente del restaurante Krystle Campbell y un niño de 8 años llamado Martin Richard.
Con información de Europa Press y CNN
bnaj