La historia de la Unión Soviética ha tenido momentos de todo tipo en la historia, uno de ellos tiene que ver con la empresa Pepsi. Esta bebida se convirtió en el primer refresco de origen estadounidense vendido en la Unión Soviética, lo que hoy es Rusia.
Eso ocurrió a finales de los años ochenta y de esta forma se convirtió, por accidente, en una potencia naval. En 1959, Moscú realizó la Exhibición Nacional Estadounidense que formaba parte de un intercambio cultural entre ambas potencias.
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Por qué la empresa se convirtió en potencia
Estados Unidos podría mostrar, por primera vez, algunos productos de empresas importantes en su país para hacerlas llegar la Unión Soviética.
La intención era mostrar lo bueno del sistema capitalista y cómo impactaba de forma positiva en sus ciudadanos. Fue Richard Nixon el encargado de guiar al primer secretario soviético, Nikita Khrushchev, por la exposición.
Un ejecutivo de Pepsi se acercó al líder soviético con un vaso de refresco, el cual disfrutó mucho e invitó a todos a probarla.
Esto permitió que la empresa de refrescos pudiera vender su producto estrella en la Unión Soviética, siendo la primera compañía estadounidense en lograrlo.
En 1989 la compañía tenía como objetivo seguir creciendo en la Unión Soviética, lo cual implicaba mantener la demanda de 287 millones de consumidores.
La única solución era negociar un nuevo acuerdo pues Moscú ya no podría ofrecer un producto que no pudiera ser conseguido del otro lado del mundo.
La alternativa ofrecida por la Unión Soviética fue relacionada con su poder militar. El pago se hizo con 17 submarinos y 3 barcos.
Al año siguiente ocurrió la negociación con Pepsi que recibió barcos petroleros y de carga, equivalente a 3 mil millones y convirtiéndose así en la sexta potencia naval del mundo.
chp