Casi una semana después de que activistas ambientales lanzaron sopa de tomate a un cuadro de Van Gogh, nuevamente este acto de protesta se repitió este domingo cuando dos jóvenes ecologistas arrojaron puré de papa a un cuadro de Monet, valuado en alrededor de 111 millones de dólares.
Los integrantes del grupo alemán de protesta por el cambio climático 'Última Generación' lanzaron puré de papa al cuadro 'Meules, fin de l’été' del pintor francés impresionista Claude Monet, en el Museo Barberini de Potsdam, al sur de Berlín, para exigir a la clase política que tome medidas efectivas para combatir el cambio climático.
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Ambos activistas entraron al recinto vestidos con chalecos reflectantes y se arrodillaron en el piso. Uno de ellos pronunció: "La gente está hambrienta, se está congelando, se está muriendo. Estamos viviendo una catástrofe climática. Y lo único que te da miedo es sopa de tomate o puré de tomates en una pintura".
"¿Sabes que me da miedo a mí? Estoy asustada porque la ciencia nos dice que no podremos alimentar a nuestras familias en 2050 [...] Esta pintura no valdrá nada si tenemos que pelear por comida", agregó su acompañante.
La obra de arte afectada, pintada por por Monet en 1890 y que forma parte de la serie Almiares, fue subastada en 2019 por 110,7 millones de dólares en Nueva York. Más tarde, el grupo 'Última Generación' confirmó la protesta en una publicación en Twitter.
“Si se necesita una pintura, con #purédepapas o #sopadetomate, para que la sociedad recuerde que el curso de los combustibles fósiles nos está matando a todos: ¡entonces le daremos #puré de papas en una pintura!”, escribió el grupo en Twitter, junto con el video de la acción.
Este incidente ya es el segundo en su tipo perpetrado por grupos activistas contra el cambio climático en toda Europa. La semana pasada, dos manifestantes de 'Just Stop Oil' también arrojaron sopa a la pintura 'Los Girasoles' de Van Gogh en la Galería Nacional de Londres.
En su momento, la organización ecologista afirmó que el objetivo de estas acciones es exigir al gobierno de Reino Unido el fin de la producción de combustibles fósiles. Por estos hechos, Anna Holland, de 20 años, y Phoebe Plummer, de 21, se declararon inocentes en su comparecencia ante el juez de distrito Tan Irkam.
En ese momento, la galería informó que el cuadro en sí no resultó dañado, ya que estaba protegido por un vidrio, pero el marco sí sufrió "daños menores".
Con información de EFE y RT
bnaj