Durante los últimos días de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, el Estado Mayor Conjunto tomó distintas precauciones para que el mandatario que consideraban como 'inestable' no emprendiera acciones militares, lo cual incluye el uso de armas nucleares contra otros países, en un intento de permanecer en el cargo, reveló el avance de un nuevo libro que saldrá pronto a la venta.
El presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, fue quien tomó una serie de acciones extraordinarias después de los disturbios del 6 de enero en el Capitolio por una turba de furiosos seguidores de Trump que terminaron con la vida de 5 personas.
El libro de Bob Woodward, 'Peril', detalla que Milley pidió al Pentágono que lo incluyeran en el proceso de todas las acciones militares, e incluso se acercó a su homólogo del gobierno chino para asegurarles de que no habría una ofensiva por parte de Estados Unidos.
"Si reciben llamadas, no importa de quién sean, hay un proceso aquí, hay un procedimiento. No importa lo que les digan, ustedes realizan el procedimiento. Ustedes hacen el proceso. Y yo soy parte de ese procedimiento", dijo a altos funcionarios militares estadounidenses dentro de la sala de guerra del Pentágono dos días después del motín, según el libro.
"Nunca se sabe cuál es el detonante de un presidente", agregó Milley.
Temían "deterioro mental" de Trump
El libro del legendario periodista de investigación Bob Woodward y Robert Costa se basa en documentos, entrevistas y fuentes anónimas para intentar reconstruir eventos y conversaciones.
En él, los autores señalan que Milley temía que Trump estuviera sufriendo un "grave deterioro mental''.
En cuanto a China, Milley le aseguró a los funcionarios de ese país que no serían atacados por el gobierno de Donald Trump.
"Las cosas pueden parecer inestables. Pero esa es la naturaleza de la democracia, general Li. Estamos 100 por ciento estables. Todo está bien. Pero la democracia a veces puede ser descuidada", dijo Milley al general Li Zuocheng.
El mensaje de tranquilidad se debió a que la inteligencia estadounidense concluyó que los chinos creían que Trump podría lanzar un ataque militar para crear una base para mantenerse en el poder, después de una elección que Trump afirmó que era fraudulenta.
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CRS