Un estudio asegura que las mujeres embarazadas que están contagiadas de COVID-19 y que presentan síntomas leves o nulos, tiene cambios inmunológicos que contrarrestan la inflamación asociada con el virus.
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Los efectos graves del coronavirus se dan como resultado de una respuesta del sistema inmunológico del cuerpo que sobreproduce una molécula de proteína reguladora de este llamada citoquinas.
Una "tormenta de citoquinas" podría conducir a una inflamación que cause daño tisular, falla de órganos e incluso la muerte.
Investigadores de Italia, Estados Unidos y Australia examinaron los niveles de 62 citoquinas en el plasma sanguíneo de 14 mujeres embrazadas infectadas de coronavirus, junto con otras 28 embarazadas no infectadas y 15 mujeres de la misma edad que no estaban embarazadas. Además, monitorearon los niveles de células clave del sistema inmunológico.
“Las mujeres embarazadas con SARS-CoV-2 pueden controlar la inflamación mediante la producción de moléculas antiinflamatorias que contrarrestan las proinflamatorias”, asegura el investigador principal, Andrea Cossarizza, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Módena y Reggio Emilia.
Cossarizza agregó que si las mujeres embarazadas se encuentran sanas y no presentan factores de riesgo como obesidad o hipertensión, pueden tener una respuesta controlada al coronavirus.
Esto se le atribuye a los cambios naturales del sistema inmunológico durante la etapa de embarazo, lo que protege al feto mientras está en desarrollo.
Las investigaciones en mujeres embarazadas continuarán y esperan descubrir otros detalles sobre los mecanismos moleculares detrás de los efectos protectores.
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amv