Este martes primero de junio, China reportó el primer caso de una persona infectada con una nueva cepa de la gripe aviar, denominada como H10N3.
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La Comisión Nacional de Salud de China emitió un comunicado en el que confirmó que se trata de un hombre de la ciudad de Zhenjiang, que fue hospitalizado el pasado 28 de mayo a causa de la enfermedad. Sin embargo, no dieron más especificaciones sobre su estado o la manera en la que se contagió.
Filip Claes, coordinador de laboratorio regional del Centro de Emergencia para Enfermedades Transfronterizas de los Animales de la Organización para la Agricultura dijo a Reuters que este no es un “virus muy común”.
De hecho, agregó que en los últimos 50 años, hasta el 2018, solo se informaron alrededor de 160 aislamientos del virus, principalmente en aves silvestres o aves acuáticas en Asia y algunas partes limitadas de América del Norte, y hasta ahora no se había detectado ninguno en pollos, ni en humanos.
¿Se acerca otra pandemia?
La Comisión Nacional de Salud de China aseguró que no se trata de un virus “patogénico”, es decir que se contagie con facilidad entre los humanos.
De hecho, los Centros de Control de Enfermedades afirmaron que la gripe aviar más conocida (H7N9), procedente de China, se obtiene principalmente al entrar en contacto con animales infectados.
“En China se han identificado casos raros de propagación limitada de persona a persona de este virus, pero no hay evidencia de propagación sostenida de persona a persona. Se han informado algunas infecciones humanas con el virus asiático H7N9 fuera de China continental, Hong Kong o Macao, pero todas estas infecciones se han producido entre personas que habían viajado a China antes de enfermarse”.
Sin embargo, no descartan la posibilidad de una epidemia debido a la forma en la que este tipo de virus suelen mutar continuamente, aunque esta no se daría de forma inmediata, sino solo en casos extremos donde se den contagios a mayor escala de aves a humanos, lo cual parece un poco probable.
acmg