La vacuna monodosis Sputnik Light contra COVID-19 ha mostrado ser eficiente en un 70% contra la variante Delta a solo tres meses de su aplicación.
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De acuerdo con un comunicado del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) y el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología, la vacuna rusa puede superar hasta el 75% de eficacia.
La aplicación que se realizó en personas mayores de 60 años demostró que logra el más alto porcentaje ya mencionado, en casos graves y en hospitalización es aún mayor.
Los estudios se realizaron en 28 mil personas, quienes fueron inoculadas con Sputnik Light en Moscú, Rusia. Los datos se compararon con el grupo de control de 5,6 millones de personas que no están vacunadas.
"Los indicadores de la eficacia de Sputnik Light contra la variante Delta superan los indicadores de las vacunas extranjeras de dos componentes que demuestran una disminución considerable de su eficacia por debajo del 50 %, cinco meses después de la vacunación", dice el comunicado.
Esto de acuerdo con una comparación que se realizó con la vacuna de la farmacéutica Pfizer, cuya eficacia disminuyó del 88 al 47% a cinco meses de la segunda aplicación.
Durante las campañas de vacunación se obtuvieron datos que confirman la alta seguridad y eficacia de la vacuna rusa.
Asimismo, una de las ventajas es que tiene un porcentaje cercano al de la vacuna Sputnik V, la cual cuenta con 83% de efectividad y un 94% contra la hospitalización.
"La vacuna Sputnik Light es una buena solución para los países con tasas de vacunación bajas gracias a su esquema de un solo componente y podrá ser empleada con éxito para mantener la inmunidad de la población ya existente como una dosis de refuerzo", indicó el subdirector del Centro Gamaleya, Denís Logunov.
Con información de RT
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amv