Adamari López es un referente de la cultura latina que ha logrado traspasar fronteras y formar una exitosa carrera televisiva y dentro del mundo del entretenimiento en Estados Unidos. Su vida ha sido privada y todos hemos sido testigos de los grandes cambios físicos que ha tenido a lo largo de los años. Cuando se enfermó comenzó a ganar mucho peso, que, aunque fue difícil que recuperara su talla normal, hubo algo que la motivó a lograrlo.
En un reciente video de YouTube de su canal nombrado ‘Ada y Chiqui de Show’, Adamari López detalló su largo y complicado trayecto para bajar de peso. La actriz revela que desde joven fue muy delgada debido a que así es su fisonomía y su estilo de vida y gusto por los deportes le ayudaba a mantenerse en forma, lo que le ayudó a conseguir protagonizar una gran cantidad de telenovelas en México. “Cuando yo era chiquita siempre fue delgadita”
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“A mí siempre me gustó bailar, siempre me gustaron los deportes, no era buena, pero hacía gimnasia. Se me daba el estar delgada”, reveló.
Sin embargo, en varias ocasiones ha revelado que fue cuando enfermó de cáncer de mama que comenzó a ganar peso. Las principales causas fueron su diagnóstico de cáncer, las quimioterapias, los tratamientos fertilizantes y además la depresión que llegó después de que le quitaran el seno enfermo. Todo eso desencadenó que cambiara sus hábitos saludables y los sustituyera por una vida sin ejercicio y llena de comida chatarra.
“Hasta que yo no me enfermé de cáncer, yo siempre fui delgada… empecé a ganar peso en ese momento. […] Cuando empecé a estar gordita. Empezó a cambiar mi cuerpo y me fui descuidando en todos los aspectos. No hacía tanto ejercicio, no comía bien y empecé a ganar muchísimo peso”.
Adamari López aseguró también en el video que una vez que quiso comenzar a cambiar su imagen física le “costó mucho trabajo”, debido a que siempre recaía una y otra vez en los malos hábitos, pero no fue sino hasta que su hija nació que se encontró en ella una motivación para ser su mejor versión.
“Yo tuve una (motivación) maravillosa. Ya yo tenía a Alaïa y yo sentía que no tenía ni el ánimo ni la fuerza para jugar con ella. La habilidad, la agilidad como para poder jugar con ella me sentía muy pesada. Entonces yo decía, tengo que bajar (de peso)”, confesó.