Raúl de Molina confirmó que él y su esposa Mily de Molina se llevaron un gran susto, hace unas semanas debido a que ella se contagió de coronavirus.
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El conductor del famoso programa ‘El Gordo y la Flaca’ confesó en una entrevista exclusiva con ‘Hola USA’ que su pareja se sintió mal debido a un inesperado contagio, a pesar de que solía tomar todas las medidas de protección.
El cubano contó a la publicación que un día por la mañana Mily se levantó si ningún síntoma aparente, pero luego de hacer un inventario de unas obras de arte, regresó a casa y le dijo que sentía el cuerpo cortado.
Ella tenía administrada la pauta completa, vacunada con la Pfizer, y siempre cuida de llevar la máscara pues, pero empezó a sentirse muy mal. Le pregunté si tenía fiebre al llegar a casa y me dijo que no, pero al tocarle la frente estaba súper caliente, se puso el termómetro y tenía 103. Corrí con ella al hospital de Coral Gables, donde la atendieron de maravilla, le hicieron la prueba del COVID-19 y dio positivo. Yo había dormido con ella, le había besado esa misma mañana, pero mi prueba, gracias a Dios dio negativo, detalló de Molina.
La recuperación de Mily
El presentador también dijo a ‘Hola USA’ que cuando acudieron al hospital le inyectaron a su esposa un suero que al parecer suelen usar para acelerar la recuperación de los vacunados. Y luego la enviaron a casa a que se recuperara.
No nos dio a mi hija ni a mí. Yo le dejaba la comida en su puerta y ella salía a comer a la terraza, y ahí mismo se daba sus diez mil pasos diarios alrededor del balcón. Nunca le faltó el aire ni le bajó la oxigenación. Todo duró exactamente ocho días, detalló.
Además, Raúl de Molina agregó que luego de que superó la enfermedad toda la familia pudo viajar a sus vacaciones en Hawái, donde ahora disfrutan del sol de verano.
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acmg