Joe Biden dijo este miércoles que Estados Unidos “debería tener una culpa social” por la lentitud de las medidas para restringir el acceso a las armas de fuego, al conmemorar el décimo aniversario del tiroteo masivo en la escuela primaria Sandy Hook, en el que murieron 20 estudiantes y seis educadores.
El presidente usó el aniversario para renovar su llamado a prohibir las armas de asalto como la que se usó en el tiroteo de Sandy Hook, así como las revistas de alta capacidad.
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“Deberíamos tener una culpa social por tomar demasiado tiempo para lidiar con este problema”, dijo Biden en un comunicado. “Tenemos la obligación moral de aprobar y hacer cumplir leyes que puedan evitar que estas cosas vuelvan a suceder. Se lo debemos a los sobrevivientes jóvenes y valientes y a las familias que perdieron parte de su alma hace diez años para convertir su dolor en un propósito”.
El demócrata era vicepresidente en el momento del tiroteo y fue elegido por el entonces presidente Barack Obama para liderar un esfuerzo para endurecer las leyes de armas.
Largos años de espera
No fue hasta después del tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb en Uvalde, Texas, que el Congreso aprobó las reformas de armas más sustanciales en décadas, apuntando a las llamadas "armas fantasma" que no tienen números de serie.
Sin embargo, el llamado de Biden para una acción más agresiva, incluida la prohibición de armas de asalto, se han enfrentado a una fuerte oposición en el Congreso.
“Ya es suficiente”, dijo Biden. “Nuestra obligación es clara. Debemos eliminar estas armas que no tienen otro fin que el de matar a gran número de personas. Está en nuestro poder hacer esto, no solo por las vidas de los inocentes perdidos, sino también por los sobrevivientes que aún tienen esperanza”.
La Casa Blanca se iluminó de verde
La Casa Blanca se iluminó de verde para honrar a las víctimas del tiroteo en la escuela de Connecticut debido a que los días posteriores a la tragedia, familiares de las víctimas usaron cintas de este color para recordarlos.
“Todas las familias honran a sus seres queridos de maneras únicas, incluso a través de diferentes símbolos y colores, y el verde es el color que muchas de las familias que perdieron a sus seres queridos en el tiroteo de Sandy Hook usaron en cintas y memoriales en los primeros días después del tiroteo”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
Por su parte, el gobernador de Connecticut, Ned Lamont, dijo en un video publicado en redes sociales: “Newtown, siempre estarás en nuestros corazones”.
El estado aprobó nuevos controles de armas después de la masacre, incluida la prohibición de ciertos rifles semiautomáticos y cargadores de gran capacidad.
“Qué sería aún más trágico: si no aprendiéramos y hiciéramos todo lo posible para asegurarnos de que una tragedia como esta sea menos probable que vuelva a ocurrir”, dijo Lamont.
abc