Nuevos datos confirman que la protección de la vacuna contra COVID-19 ha disminuido para la variante Delta del virus, dijo el miércoles la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, la doctora Rochelle Walensky.
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Walensky, defendiendo las vacunas de refuerzo adicionales, dijo que un estudio estadounidense de hogares de ancianos muestra que la efectividad de la vacuna se redujo al 53% con la variante Delta.
También señaló un estudio realizado en Israel que mostró un mayor riesgo de enfermedad grave entre los vacunados temprano.
Los estudios muestran que aunque las vacunas siguen siendo muy eficaces contra las hospitalizaciones, el baluarte que proporcionan contra la infección por el virus se ha debilitado en los últimos meses.
Descubrieron que la efectividad de las vacunas de dos dosis de Pfizer y Moderna para prevenir cualquier infección por coronavirus (leve o grave) descendió de 74.7% a 53.1%.
No está claro si la disminución de la protección contra las infecciones es el resultado de la disminución de la inmunidad, una disminución en las precauciones, como el uso de máscaras, o el aumento de la variante delta altamente contagiosa, o una combinación de los tres.
Los nuevos estudios indican en general que las vacunas tienen una efectividad de aproximadamente el 55% contra las infecciones, el 80% contra las infecciones sintomáticas y el 90% o más contra la hospitalización, señaló Ellie Murray, investigadora de salud pública de la Universidad de Boston.
La caída en la protección contra la infección podría ser el resultado de una mayor exposición a la variante altamente contagiosa durante un período de interacciones sociales sin restricciones, agregó.
"Esto me parece una posibilidad real, ya que muchos de los que se vacunaron temprano estaban motivados por el deseo de ver a amigos y familiares y volver a la normalidad".
Murray dijo que los refuerzos indudablemente aumentarían la inmunidad en un individuo, pero el beneficio puede ser mínimo, y se obtiene con la misma facilidad usando una máscara o evitando las comidas en el interior y los bares llenos de gente.
Los resultados del estudio fueron citados por las autoridades sanitarias el pasado miércoles cuando anunciaron que las vacunas de refuerzo contra Covid-19 se pondrán a disposición de los estadounidenses a partir del 20 de septiembre.
Con información de Reuters.
jos