Al menos cinco buques petroleros fueron reservados por las refinerías de Estados Unidos para almacenar gasolina en el Golfo de México.
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Esto ocurrió después del ciberataque que ha paralizado al mayor oleoducto del país, según han informado fuentes y datos del transporte marítimo.
Las refinerías del Golfo de México han reducido sus operaciones por falta de almacenamiento debido al ataque a la red de oleoductos. Las restricciones al transporte de combustible iniciaron en Carolina del Norte como un recurso para combatir la escasez.
Los petroleros tienen una capacidad de, al menos, 350 mil toneladas de combustible. Las reservas eran de hasta un mes y tres de ellas podrían ser canceladas, de acuerdo con datos de la industria de brokers marítimos.
La red de oleoductos de 8 mil 850 kilómetros transporta combustibles como gasolina, diésel y combustible para aviones. Por esa razón fue cerrada para proteger sus sistemas.
Tras el ataque, fueron reservados también varios buques cisterna por los operadores para enviar gasolina y diésel desde Europa hasta la costa este de Estados Unidos.
¿Cómo fue el ciberataque en el oleoducto de Estados Unidos?
El ciberataque fue realizado a través de un código llamado “ransomware” que aprovecha los vacíos en la seguridad para encriptar mensajes informáticos y pedir un rescate para desbloquearlos.
Este intento de extorsión ocasionó el cierre del principal oleoducto de Estados Unidos. Fue realizado por la banda delictiva Darkdside.
La organización roba a las grandes corporaciones y da una parte a la caridad, de acuerdo con los primeros informes de personas cercanas a la investigación.
Como consecuencia del cierre del oleoducto el precio del barril ha subido por los temores sobre la paralización oleoductos en Estados Unidos.
El oleoducto Colonial transporta más de 2.5 millones de barriles por día. Desde el lunes argumentaron estar trabajando para restaurar sus trabajos antes del fin de semana.
chp